ENDOCARE AQUAFOAM LIMPIADOR FACIAL 125ML

Qué es

• Es un limpiador facial en formato espuma (espuma micelar) de la gama Endocare. 

• Su fórmula incluye agua abisal del Mar Cantábrico — rica en minerales y oligoelementos — y otros activos como ácido cítrico, extracto vegetal y péptidos/extractos reparadores, pensados para limpiar, calmar e hidratar la piel. 

Para qué sirve / qué aporta

• Limpia profundamente el rostro, eliminando impurezas, exceso de sebo, contaminación y restos de maquillaje. 

• Puede actuar incluso como desmaquillante (especialmente si el maquillaje es ligero). 

• Aporta hidratación y suavidad gracias al agua marina mineral — ayuda a preservar la barrera natural de la piel. 

• Tiene un efecto limpiador suave y respetuoso, adecuado incluso para pieles sensibles o reactivas. 

• Deja la piel con sensación de limpieza, frescor y preparación adecuada para aplicar tratamientos posteriores (hidratantes, sérums, etc.). 

A quién va dirigido

• Personas con todo tipo de piel, incluidas pieles sensibles o reactivas.

• Personas con piel grasa, mixta o con exceso de sebo, que buscan un limpiador eficaz pero suave. 

• Personas que se maquillan o usan productos cosméticos a diario y necesitan un limpiador que elimine impurezas y restos de producto.

• Personas que quieren un limpiador diario cómodo para uso mañana y noche, incluyendo uso tras tratamientos dermatológicos.

Cómo usarlo (modo de empleo)

1. Agita el envase antes de usar. 

2. Humedece tu rostro ligeramente con agua. 

3. Aplica una pequeña cantidad de espuma sobre la piel y masajea suavemente con movimientos circulares. 

4. Aclara con abundante agua. 

5. Puede usarse a diario, mañana y/o noche, como parte de tu rutina de limpieza facial. 

Qué características destacan

• Limpieza eficaz sin resecar ni irritar — apto también para pieles sensibles.

• Combina limpieza + hidratación + efecto calmante/regenerador gracias a su agua marina y activos. 

• Textura en espuma, ligera, cómoda de aplicar y fácil de aclarar. 

• Adecuado para preparar la piel antes de aplicar otros tratamientos (cremas, sérums, etc.).